Desde que éramos niños hemos escuchado el refrán “Enfermo que come, no muere”, frase que alude a la importancia de una adecuada nutrición para las personas que están superando una situación médica; así mismo nuestras madres y abuelas han tenido presente la importancia de alimentar apropiadamente a su familia para mantenerla sana. Lo anterior evidencia un saber intuitivo: una adecuada nutrición es de notable relevancia para mantener la capacidad de los seres humanos para enfrentarse a las enfermedades.
Sin embargo, no sólo la intuición favorece dicha tesis, la ciencia también lo hace. Es así como se han realizado gran cantidad de investigaciones que muestran que el consumo de todos los grupos de alimentos a saber, proteínas, carbohidratos y grasas además de los oligoelementos (vitaminas y minerales) es vital para mantener al sistema inmunológico con un funcionamiento idóneo.
Investigaciones han mostrado, por ejemplo, que la deficiencia de vitaminas, proteínas o aminoácidos provoca disminución de la respuesta inmune en las células; mientras que la deficiencia de minerales influye en la división de las células inmunitarias y de la respuesta a los anticuerpos. Así mismo, se han encontrado inhibidores de respuestas inmunológicas en la sangre de personas desnutridas.
A partir de lo anterior se pone de manifiesto la importancia de ingerir en nuestra dieta todos los grupos de nutrientes; todos ellos se encuentran de manera natural en los alimentos que consumimos, sin embargo la baja calidad en la alimentación de la vida moderna muchas veces no los suple, por lo que se hace necesario suplementar algunos de ellos mediante productos especializados para tal fin.
Adicional a los alimentos cotidianos se ha encontrado que algunos suplementos como el calostro bovino, favorece el sistema inmunológico debido a la gran variedad de inmunoglobulinas que contiene; así como sus componentes con propiedades antimicrobianas. Del mismo modo, se han investigado las propiedades de varias clases de hongos como el shiitake el cual da una mano para fortalecer nuestro sistema de defensas.
Es así como se demuestra que una adecuada nutrición suple un papel fundamental en el mantenimiento de un sistema inmunológico sólido que permita al cuerpo hacer frente a virus y baterías que pueden llegar a ser altamente peligrosos para nuestra salud y la de nuestra familia.
Y tú, ¿Cómo estás manteniendo tu sistema inmunológico y el de tu familia?
1La Nutrición, su relación con la respuesta inmunitaria y el estrés oxidativo. Revista Habanera de Ciencias Médicas V7 N4 Ciudad de la Habana Oct-Dic 2008